jueves, 21 de enero de 2016

NO DEJES QUE EL ASMA TE IMPIDA HACER EJERCICIO





No Dejes Que El Asma Te Impida Hacer Ejercicio

El ejercicio es muy importante para todos, incluso las personas que padecen de asma. Usa los siguientes consejos para asegurarte de que tu asma no interfiera con tu régimen de ejercicio diario.

Los ataques de asma que se provocan debido al ejercicio, ocurren si los síntomas del asma se desarrollan o empeoran durante el ejercicio. Actualmente, las recomendaciones de los médicos sugieren que controlar el asma efectivamente significa incluir el ejercicio en la vida diaria. Seguramente tu médico te recomendará algún medicamento para antes de hacer ejercicio y por supuesto te advertirá que dejes de hacer ejercicio si no te sientes bien.

Si se presentan síntomas que con frecuencia te impide continuar tu rutina de ejercicio, considera modificar tus ejercicios. Existe una gran variedad de ejercicios de diferente intensidad que permite que la mayoría de personas pueda practicarlos sin causarles daño. Algunos ejercicios pueden ser tradicionales como trotar o jugar fútbol y otros pueden ser nuevos como el Zumba.

Ya sea que decides hacer ejercicios aeróbicos o de fortalecimiento muscular, consulta con tu médico; explica tus objetivos y sigue las recomendaciones que te ofrezca. Muchos doctores pueden recetar medicamentos especiales para antes de hacer ejercicio que ayudarán a evitar ataques de asma. También suelen prescribir medicamentos que te ayudarán a aliviar cualquier síntoma que desarrolles mientras haces ejercicio.

Escoge ejercicios que no provoquen que tus síntomas de asma empeoren. Una vez que hayas consultado con tu médico y hablado sobre tus objetivos y tu médico esté de acuerdo en que participes en una rutina de ejercicio, considera escoger ejercicios que sean conocidos por no provocar ataques de asma, por ejemplo caminatas y natación.

El asma que se produce debido al ejercicio, con frecuencia se describe como espasmo bronquial, y debes detenerte de inmediato si tienes problemas para respirar. A pesar de que debes detenerte enseguida si sientes que el ejercicio está empeorando tus síntomas de asma, muchos médicos indican que puedes continuar con la actividad física si tus medicamentos para aliviar síntomas de inmediato te ayuda a sentir mejor.

Si respiras a través de tu boca puedes empeorar los síntomas de asma que se producen por la actividad física, por eso es muy importante que respires por la nariz. Algo tan simple como hacer un esfuerzo consciente por respirar a través de la nariz en lugar de la boca, te puede ayudar durante el ejercicio incluso si de vez en cuando respiras por la boca.

Si el clima frío hace que tus síntomas de asma empeoren, es importante que elijas actividades físicas que puedas hacer en un ambiente interior, como un gimnasio.

También es recomendable utilizar una mascarilla para cubrir tu nariz y boca si es que decides hacer ejercicio en clima frío. El aire seco y frío por lo general empeora los síntomas del asma.

Es beneficioso hacer un calentamiento antes de comenzar a realizar ejercicio ya que esto te ayudará a reducir el cambio de temperatura del aire que respiras antes de que llegue a los pulmones, que se sabe puede ocasionar un ataque de asma.

De igual manera es importante hacer ejercicios de enfriamiento una vez que has terminado tu rutina física. Esto te ayudará a regular tu respiración después del ejercicio.

Antes de hacer ejercicio, busca un lugar adecuado para ti, es decir un lugar cuyo ambiente se encuentre libre de agentes que provocan ataques de asma, tales como polvo y polen.

Has un seguimiento de cómo reacciona tu asma a las diferentes rutinas de ejercicio. Escribe un diario sobre qué ejercicios haces y cómo estos ejercicios influyen con tu asma.

El ejercicio es muy importante para mantener la buena salud de todos, incluso si padeces de asma. Usa los consejos mencionados anteriormente para incrementar tu comodidad y habilidad de hacer ejercicio a pesar de tener asma.



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